Me sonríe esa boca,
que a mi me está provocando,
y mi pasión se desboca.
Déjame tus labios besar,
muy lentito, de a poquito,
que con los besos un collar.
Voy a hacerte muy despacio,
y en tu cuello voy adornar,
sin dejar ningún espacio.
¡Mi niño! Dame un cachito,
de ese amor que tu te guardas,
aunque cometas delito.