Si tus labios con mi cuerpo se rozan,
mi piel origina un terremoto,
van, "toditos" mis poros y se alborozan,
y la pasión corre como una moto.
Si tu dedos en mi cuerpo gozan,
con tus caricias, entera yo floto,
despiertan fantasías que esbozan,
que ni impido, ni tampoco acoto,
no se puede refutar que retozan,
fervoroso, astuto y devoto,
ni negar que de
pasiones rebozan,
y ya no necesita un buen piloto,
una vez que se ha iniciado el vuelo,
ya sin timonel, se llega al cielo.