Fiebre de besos
¡Ay mi amor! que de sed muero,
en estas frías madrugadas,
que mi boca deseada,
busca elixir pendenciero.
Si por ti me desespero
y aún aguardo tu morada…
¿Por qué mi fiebre no apagas?
De esos besos que espero
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No sé por que pero me recuerda la poesía de Santa Teresa o de San Juan de la Cruz, tal vez sea un disparate, yo no lo creo, ya me dirás...
ResponderEliminarDos estrofas fueron suficientes para dejarme pensando, recordando, sintiendo y no se que más.
ResponderEliminarGracias por escribir de esa manera.
Un abrazo
joooo!! Manuel no llego ni a las suelas de los zapatos...Por dios!!
ResponderEliminarEn el plano religioso, mucho menos, soy creyente, pero sin ser practicante, y además tengo mi propia filosofía, y mis creencias "razonables"
Un abrazo
Mariola
Wenceslao, me alegro que mis letrs y mis estrofas, te transporte a buenos recuerdos, a un "sentir" y aún "yo que se" que decimos por andalucía.
ResponderEliminarMe encanta que mis estrofas hagan temblar de recuerdos o de sentimientos, aunque sé que no llego a tanto...
Un gran abrazo
Mariola
Si tus letras hacen que uno sueñe
ResponderEliminarque vayamos a otro tiempo y a otro
espacio. Tu poesia tiene esa magia
de adentrarnos en cada verso.
Gracias. Mar, por darnos tu sensibilidad.
Un saludo enorme y un besito.
La vida tiene muchos desafios Jorge, y al menos debemos tener eso: Sueños para no caer en un estado de apatía.
ResponderEliminarLos sueños, con equilibrio de realidades, son buenisimos para la salud mental de todos.
Eres exquisito en tus comentarios, y me encanta que no seas solo unas letras escasas... sino que te adentres al fondo...
Un gran besote.
Mariola