Besos sigilosos

Besos sigilosos

…Y vi, como se escurrían los besos,

aquellos…que tú y yo ya soñamos;

mientras nuestras fantasías enredamos,

y  las quimeras nos calan los huesos.

Porque amores los hay inconfesos,

hasta de lujuria a veces sangramos;

con falta de osadía silenciamos,

por querer evitar esos excesos.

Al amanecer sobre mi almohada,

el conformismo se queda anclado;

deshaciendo las notas al pentagrama,

los deseos se esfuman en la nada;

al caminar…todo queda de lado,

desdibujando cualquier cronograma.

Buscando endorfinas

No hay nada igual que  desatar la pasión

solo por el instinto conducido,

para sentir el cuerpo estremecido;

como volcán en plena erupción.

Que vuele la lujuria sin más razón,

y libere  ese animal dormido;

que ya vivir el día a día oprimido,

nos deja en brazos de la desazón.

Sin  locura, la vida no tiene salsa,

Que se multiplique la “endorfina”,

sosegando los más profundos males;

convirtiendo a tus días en una balsa,

para afrontar,  la vida su rutina,

y al  cuerpo de placeres terrenales.

Mariola López

La noche desnuda

La sombra de la noche,

desdibujan las sombras,

cuando el día, se desnuda

de las mentiras dichas,

por la atarjea se evacuan las quimeras,

que se corrompe y se pudre,

sin que la absorba el subsuelo.

Ya no habrá fuente,

que vuelva a emanar,

se ha secado el manantial

del valimiento.

Hastío

Cuando  el desinterés más bien apura

por tomar  el camino, equivocado

es conveniente estar  avispado

para evitar  un corazón que supura.

La huida   se  torna, rápida y pura

sin sentirte por ello apocado

quizás te libraste de un   pecado

cansada, de tener tanta mesura.

Cada cual que tome por su camino

para no sentir un mal que me oprime

por haber fallado con mi  buen tino

y…hasta mi buena fe  me  deprime

cuando fluye un  interés  anodino.

¡¡Por favor…! A mí no me subestime.

Pretendiendo encontrar...

SONETO.-

Pretendiendo encontrar cuanta distancia
media entre lo que digo por la boca
y lo que piensa mi cabeza loca
no logro eliminar su discrepancia,

ni entre lo que hago a golpe de constancia
y lo que el mundo externo me provoca,
con el juicio más duro que una roca
querría darle suma relevancia.

Si apenas logro que el amor proteja
sin recelo el semblante del planeta,
sin saber cómo ni con qué pujanza

podría proteger desigual queja
si obedeciendo a tanto anacoreta
o sellando yo mismo mi confianza.

Luis Perez

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Pretender encontrar media distancia
entre lo que tus pensamientos evoca
tus palabras,  perfila y trastoca
y se visten de una gran elegancia.

Te fustiga con la perseverancia
y así el tesón no se  disloca
luchando hay veces que te descoloca
el empeño desparrama en constancia.

Hay veces que la vida aconseja
dejar un rato de tocar la “trompeta”
para equilibrar bien nuestra balanza.

De los dos “YO” que  es compleja
que nos haga mella en la “chaveta”
al pozo ir… de la  desesperanza.

Mariola López